viernes, 28 de junio de 2013

Zoran Vrkic el fichaje sorpresa

Hoy ha comenzado mi nueva andadura de la mano de Zona Dostres, dónde podréis seguirme en las noticias sobre el Bilbao Basket. Como os cuento ahí:


"El escolta croata Zoran Vrkic, procedente del Ikaro griego, es el nuevo jugador del Bilbao Basket. Llega con un contrato de un año bajo el brazo, con opción de un segundo. El jugador de 25 años y 2.00 metros de estatura llega precedido de unos buenos 11 puntos (55.6% T2, 40.2% T3 y 83.2% en TL) por partido en la liga griega, así como 5 rebotes y 1.5 asistencias de media en los 28.5 minutos que estaba en cancha.


El fichaje por sorpresa del balcánico parece cerrar las puertas a la incorporación de Andreja Milutinovic, que era el nombre que se barajaba hasta hoy en las oficinas del club, y que de hecho, había estado a prueba hace una semana con el cuerpo técnico del equipo bilbaíno.
Foto: Euroleague/getty
Durante este pasado curso Vrkic ha sido pieza importante dentro del Ikaros griego, dónde ha destacado por su gran tiro exterior, que ejecuta con brillante rapidez y efectividad. Aporta mucho en el rebote ofensivo, aprovechando su buen físico. Buen jugador, que no tiene problemas en encarar el aro y penetrar a canasta.
En el Bilbao Basket su aportación llegará desde el banquillo, desde dónde se espera que aporte frescura y minutos de calidad."
Ahora os espero en Zona Dostres, aunque por aquí seguiré escribiendo alguna cosilla, pero no de forma tan informativa sino que será más opinión. Un saludo a todos.
When Warriors Dream

jueves, 23 de mayo de 2013

El Bilbao Basket contra viento y marea

Empiezan los Playoff de la Liga Endesa, y lo que debería ser un motivo de ilusión parece haberse tornado en todo lo contrario. El ambiente que envuelve a los Hombres de Negro, es, precisamente, oscuro y no parece traer consigo muy buenas noticias. Como ya escribí en una entrada anterior, el final de temporada de los hombres de Katsikaris ha estado lejos de ser el deseado, pero desde la final de la Eurocup, desde ese viaje a Charleroi, todo han sido malas noticias. En lo deportivo y en lo interno del club.

Ayer llegaban los bilbaínos a Barcelona por la noche, y eran menos aún de los pocos esperados. A las ya conocidas bajas de Kostas Vasileiadis y Milovan Rakovic se sumaba a última hora la de Fran Pilepic, que con una rotura en el ligamento deltoideo de su tobillo derecho probablemente será baja lo que queda de temporada. Sobre todo ello quedan flotando temas como el conflicto con Uxue, la huelga de la ABP, y los salarios sin cobrar; que sobrevuelan las mentes de una plantilla ya de por si alicaída.

Enfrente el siempre poderoso Barcelona, que aunque llega con Navarro tocado, y las bajas de Jawai y Pete Mickeal, cuenta con un roster amplio y de grandísima calidad. Y aunque Lorbek esté lejos de sus mejores temporadas, siguen siendo un equipo muy completo y competitivo. Un equipo que practicará, como desde la llegada de Xavi Pascual llevan haciendo, una gran defensa, y que mantendrá el control del ritmo de partido siempre que les sea posible. Y depende del tipo de partido, pueden amoldarse a un juego de correr y anotaciones altas, o su más preferido basket-control y marcador con dígitos que no pasen de los 75 puntos.

Ahora, más que nunca, Fotis debería ser capaz de dar al equipo el plus competitivo que se perdió en Charleroi, los Playoff son una nueva fase a la que deberíamos entrar con energías renovadas y con la ilusión en plenitud, aunque lejos está el entorno de ello, como ya hemos dicho.
Foto: ACB.com
Hoy hay que jugar sin presión, siendo competitivos, y con la ilusión de que aún esta temporada puede acabar siendo positiva, que se han hecho cosas muy grandes. No queremos terminar con mal sabor de boca del que había sido un menú exquisito hasta el postre. Afición y equipo deben renovar expectativas, cambiar la cara y empezar a soñar otra vez, y todo esto solo es posible de una manera, saliendo de Barcelona con una victoria debajo del brazo y una sonrisa pintada en la cara.

Ahora en la adversidad es cuando más tenemos que crecernos, y para ello hay que creer en nosotros mismos, este equipo, esta plantilla entera, ya nos han demostrado que ante la adversidad son capaces de alzar la cabeza, levantar más alto las espadas y luchar con arrojo hasta el final. Pues bien, eso es lo que yo pido a este equipo, que se reagrupen, que cojan carrerilla y que se preparen para la guerra. Y por favor, sobre todo, que renueven la ilusión de los 10.000 que cada partido llenamos Miribilla.

When Warriors Dream

martes, 21 de mayo de 2013

La hora de Fotis

Allá por 2010, y mientras todos asimilábamos la marcha de uno de los estandartes de este Bilbao Basket, Txus Vidorreta, comenzaba una nueva época para el equipo, y no solo para el equipo, sino para todo el baloncesto de Bizkaia. La llegada de Fotis Katsikaris supuso un paso adelante en el siempre ambicioso proyecto del Bilbao Basket.

En su primera temporada salvó los muebles de un equipo que, inexplicablemente ocupaba las últimas plazas de la tabla, y lo llevó a la F4 de la Eurocup, que ese año se celebró en Vitoria. Pero eso solo fue el principio. El año siguiente no se borrará de las mentes de ninguno de los aficionados al baloncesto de Bizkaia, para el recuerdo quedarán aquellos Playoff contra Valencia y Madrid, y la soñada final contra el Barcelona. Al año siguiente debut, y vaya forma de debutar, en la máxima competición europea, la Euroliga, en las mentes de todos está aquel "We feel Bilbotion" que se hizo tan famoso.

Y todo ello nos lleva a desembocar en esta temporada, en el fantástico trabajo que, año a año (y esta temporada no es para menos) ha realizado Fotis Katsikaris al frente de este equipo. Un servidor ha podido disfrutar este año de uno de los entrenamientos de Fotis previos al partido contra el Ulm en Eurocup, y créanme cuando les digo que es un trabajador nato, detallista y puntilloso en lo que hace.
Foto: EFE
Pues ahora Fotis, ahora más que nunca es cuando el equipo te necesita, ahora que las cosas se han puesto de cara, que parece que nos vienen mal dadas por todos los flancos, ahora es cuando necesitamos la fuerza y el coraje que has demostrado transmitir al equipo todo este tiempo. Yo confío, como he hecho siempre, en el excelente trabajo que has hecho dirigiendo a los Hombres de Negro todo este tiempo.

Tu lo dijiste, y a nadie se nos olvida, de hecho cada vez que entramos en el pabellón muchos de nosotros dirigimos nuestra mirada a ese cartel que reza: "Tenemos que sufrir juntos para ser grandes algún día". Pues es ahora Fotis cuando más tenemos que aferrarnos a esta frase, cuando más dificultades se aprecian en nuestro camino, ahora Fotis es cuando debemos ser más fuertes, más duros y estar todos unidos.

Yo estoy al 100% con vosotros, y estoy seguro de que Miribilla entera os demostrará una vez más este domingo que está dispuesta a sufrir. Hoy, ahora, más que nunca es tu hora Fotis. Confianza ciega de que serás capaz de hacerlo.

Tampoco olvidemos la frase que más se escribe en este blog, y que cierra cada uno de mis post:

When Warriors Dream

lunes, 20 de mayo de 2013

Final oscuro a una gran Liga Regular

El partido de la matinal del domingo en Santiago, ante un Obradoiro que quería luchar por entrar en los Playoff, fue una muestra más del bajón físico y mental que están atravesando los Hombres de Negro. No pretendo que sirvan de excusa las lesiones, ni las mermas físicas, pero es obvio que todo ello también afecta a nivel mental.

Foto: ACB Photo/ J.Marqués
Con Kostas viendo el partido en Bilbao, y Pilepic (una vez más) relegado al banquillo el Bilbao Basket se peleaba con una línea de 6,75 que hasta el último cuarto no se dejó hacer. Mientras, enfrente, un equipo que tenía mucho que ganar y que necesitaba una victoria. Resultado de todo ello, el equipo de Katsikaris por detrás todo el partido observando como Obradoiro cada vez creía más en sus opciones de Playoff.

Pero mi análisis pretende ir mucho más allá, mi análisis de la catástrofe ni siquiera comienza aqui. Allá por la lejana jornada 25 de la Liga Regular, con el equipo como 4º clasificado empatado a victorias con el Barça de Xavi Pascual, y con un calendario más que asequible por delante, comenzó la debacle. Dos derrotas seguidas ante Manresa y Fuenlabrada, supuestamente justificadas porque el equipo estaba pensando más en la Eurocup que en  la competición doméstica. Después vendrían el partido contra el Murcia, que se saldaba en positivo, y el viaje a Charleroi que podría haber cambiado el sino de la temporada.

Tras la derrota en la final de la Eurocup el equipo recibió un mazazo importante, un servidor pudo estar presente en Bélgica , y créanme cuando les digo que esa derrota sentenció la cuarta plaza y el sueño de llegar lejos en la Liga Endesa este curso. A esta derrota le siguieron una serie de acontecimientos que terminaban de medrar la moral de un grupo que hasta entonces no sabía lo que era bajar la cabeza. No voy a entrar ni en los temas económicos del club, la ayuda de la Diputación, ni el comienzo de la rumorología que colocaba a nuestro entrenador, y algunos de nuestros jugadores fuera del club la próxima temporada. Pero todo ello suponía el segundo, y seguido, mazazo moral para nuestros Men In Black.

A partir de aquí todo cambió de color, el equipo no era capaz de jugar con fluidez, la defensa (tarea pendiente toda la temporada) hacía más aguas que nunca, y los resultados no acompañaban. Derrota en Canarias ante un atrevido C.B.Canarias, seguido llegaba un pequeño bálsamo en forma de victoria ante el Cai Zaragoza en el reencuentro de los Hombres de Negro con su afición tras la derrota europea. Pero los vecinos de Vitoria vinieron a poner las cosas en su lugar y devolvernos a la realidad, a pesar de la irrupción, desde el partido anterior, de Pilepic el equipo seguía lejos de su nivel. Seguido, y casi sin poder tomarse un respiro para pensar y coger impulso, viaje a Sevilla para lograr una victoria ante un deslucido Cajasol.

Se llegaba a la jornada 33 en casa aún con opciones de luchar por la cuarta plaza, la aparición de Pilepic, y lo cercano de la meta que se quería lograr hacían soñar a algunos, un servidor incluido, de que todavía el equipo tenía mucho que decir el esta fase regular. Pero que pobres fuimos los que soñamos, el Valencia llegó a Bilbao teniendo muy claro lo que debía hacer. El planteamiento de un juego físico y duro que hizo Perasovic fue imposible para unos Hombres de Negro que lucharon hasta el último cuarto, momento en que Valencia subió un poco las revoluciones y decidió llevarse el partido.

La cuarta plaza ya se daba por imposible, y más aún, la victoria del Cai nos alejaba incluso de la quinta plaza, relegandonos al sexto puesto. Con esta derrota, de la mano, llegaban más malas noticias en el seno del club, al que se le complica la economía cada día más. Y así llegamos a la última jornada y la ya comentada derrota ante un valiente Obradoiro.

En resumen, desde la jornada 25, con el equipo en la cuarta plaza, 3 victorias y 6 derrotas, que colocan a los Hombres de Negro en el duro papel de tener que enfrentarse al F.C.Barcelona con el factor campo en contra.

Lejos están mis pretensiones de ser halagüeño pero el Bilbao Basket necesita un cambio de chip brutal para poder hacer un buen papel ante los catalanes. Todo queda en manos de Katsikaris, que puede terminar su etapa en Bilbao con un sabor agridulce o dando a la afición una alegría inesperada. Yo seguiré creyendo en lo segundo hasta que se me demuestre lo contrario.

When Warriors Dream